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inclusión social

Sonora
Obstáculos de movilidad contribuyen a inequidad social en Hermosillo: Investigadora
Kenia Paola López Cota, del Colegio Sonora, señala que los obstáculos de movilidad delimitan a una importante proporción de la sociedad a situaciones desventajosas para el ejercicio del derecho a la ciudad

En las ciudades mexicanas y en particular Hermosillo, el espacio construido de movilidad no favorece a los medios de transporte alternativos, lo que obstaculiza a sus usuarios al acceso a la ciudad central, a las oportunidades y servicios que ahí se disponen, contribuyendo a la inequidad social, expone Kenia Paola López Cota.

La investigadora del Colegio de Sonora indica que desde la planeación y el diseño urbano se desvincula a múltiples estratos y condiciones sociales del uso y apropiación íntegro de la ciudad.

“El espacio urbano debe ser creado de manera que incluya las visiones y condiciones de capital de movilidad de los y las jóvenes, las mujeres, y el resto de los grupos obstaculizados de la movilidad cotidiana”, plantea.

López Cota explica que los obstáculos de movilidad se entienden como limitaciones diversas que los sujetos encuentran en su movilidad cotidiana y vulnera su derecho a la ciudad como son: sus características, sus condiciones y los significados del mundo que lo construyen desde las experiencias cotidianas diferenciadas en el espacio urbano.

“El costo de los obstáculos en la formación de capital humano no solo se incorpora en las personas directamente obstaculizadas, sino también generará aún más inequidad social, especialmente al tratarse de personas jóvenes en su carácter de nueva generación y futuro grupo demográfico adulto del país, quienes son considerados muy móviles debido a que son estudiantes”, expresa.

Agrega que los obstáculos físico-espaciales de movilidad referentes a la inseguridad en el espacio público impiden que las mujeres se apropien completamente del espacio urbano y accedan a los bienes y servicios dentro de la ciudad de manera igualitaria, especialmente en la dimensión salud, concretamente a la salud mental por los pronunciados niveles de estrés, ansiedad, tristeza e intranquilidad a las que hacen frente.

A eso se suma que el diseño de movilidad urbana en Hermosillo está orientado a uso del automóvil particular, profundizando sus efectos negativos como el tráfico, la contaminación atmosférica y auditiva, entre otros.

Esto, plantea, ha invisibilizado y relegado las necesidades de inversión en infraestructura de movilidad alternativa en la ciudad, crucial en la construcción de ciudades ambiental y socialmente sustentables.

La investigadora recalcó que los obstáculos de movilidad se presentan como un fenómeno dinámico y caracterizado por la multiplicidad de formas que adquiere la exclusión social y urbana; y este enfoque permite desplegar la complejidad con la que se habitan las ciudades caracterizadas por la inequidad social, como es el caso de Hermosillo.

Fuente: Colegio de Sonora

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