Hace diez años, el ingeniero hermosillense Marco Antonio Gaxiola Michel instaló el primer taller de conversión de vehículos en Sonora. Adaptó un Nissan March de motor de gasolina con cuatro cilindros, para hacerlo totalmente eléctrico. La inversión para la conversión fue de 120 mil pesos, incluye una batería de litio. Lo llamó EV-March.
Después, Gaxiola Michel lanzó la iniciativa Asociación de Vehículos Eléctricos del Estado de Sonora (AVES), que reunía a interesados en el tema de los carros eléctricos en la entidad para el impulso de la adopción de esta tecnología en la movilidad sustentable.
Según publica Noro, la discusión del tema en la región atrajo la atención de propietarios de autos eléctricos e interesados en adquirir automóviles eléctricos o en la conversión, no solo en Sonora, sino en Arizona y California, Estados Unidos. Así surgió el Día del Auto eléctrico en Hermosillo, donde se ofrecían capacitaciones y se contaba con actividades lúdicas.
Resultó muy atractivo para las y los turistas estadounidenses el potencial turístico de Sonora, pues encontraron que pueden tener una estancia prolongada en la entidad, manejando un auto eléctrico, pese a la falta de estaciones de carga para diversos modelos automovilísticos.
Un tema que trasciende en redes sociales
Turistas del vecino país del norte trasladaron la discusión del tema en foros de Google Groups. Hablaban de la posibilidad de una autopista Cactus Verde, lo que más tarde sería una realidad. Desde hace cuatro años discuten la disponibilidad de más puntos de descanso y de carga para autos eléctricos en su tránsito desde Arizona hasta Sonora, con paradas en Santa Ana, Hermosillo y Guaymas.
La asociación AVES se encuentra en pausa debido a las ocupaciones del líder de la asociación en el sector de vehículos autónomos en Estados Unidos, así como ante la falta de apoyos para continuar con el proyecto en Hermosillo.
Cargadores Tesla en Hermosillo reaviva la conversación
Este año fueron instalados algunos cargadores de la marca Tesla en Hermosillo. Empezarán a funcionar una vez concluya el proceso de instalación. Alcanzarían una carga de hasta el 80 por ciento en media hora de conexión. La empresa realizaría instalaciones similares en Hermosillo, Nogales, Puerto Peñasco, Álamos, Ciudad Obregón y Caborca, en esta primera etapa.
Sin embargo, el costo para adquirir un carro eléctrico en México aún es bastante alto. En el mercado nacional es posible adquirir 19 modelos, pero sus precios van desde los 343 mil pesos hasta los 3.5 millones de pesos, según la marca y el modelo del fabricante. Pueden ser Renault, JAC, Nissan, Chevrolet, BMW, Audi, Tesla y Porsche.
Los tiempos de carga completa son de cuatro a ocho horas dependiendo del modelo, así como de la necesidad de adaptadores de enchufes para estaciones eléctricas.
Nuevas discusiones
En 2016, fue un tema de gran relevancia la Megarregión Sonora-Arizona y su desarrollo a través de la producción a gran escala de un vehículo eléctrico bajo la marca Lucid Technologies en Casa Grande, Arizona. Sus componentes serían manufacturados en el parque industrial de Hermosillo. Sin embargo, apenas se lanzó el primer vehículo en agosto pasado, sin claridad de cómo participará el sector manufacturero de Sonora en la producción de los autos.
En 2021, Peter Rawlinson, director ejecutivo y director de tecnología de Lucid Motors habló del papel de Sonora.
“Estamos cerca de gran parte de la cadena de suministro, que está al sur de la frontera con México, en la región de Sonora”.
El gobernador Alfonso Durazo Montaño ha reiterado su interés por impulsar las actividades económicas y tecnológicas que incentiven a la industria de este tipo de carros en la entidad. Enfatizó en la explotación del más grande depósito de litio del mundo, ubicado en el municipio de Bacadéhuachi, Sonora, operado por capital inglés y chino bajo el nombre Bacanora Minerals.
Sin embargo, a la fecha no hay programas locales orientados a la producción de los vehículos o baterías de litio.
Contexto
En México se estima que hay apenas 2 mil 100 puntos de carga para carros eléctricos. Representa apenas el 5% de los 42 mil 500 instalados en Estados Unidos, según El Financiero.
